Esta construcción es parte de la historia catalana del siglo X.
Se autoriza su construcción con la condición de que se edifique un castillo y una iglesia que sirvieran a la lucha contra los moros.
Algunos de sus muros tienen un grosor de dos metros, se fue ampliando y modificando a lo largo de los años.
Durante la Primera Guerra Carlista un batallón de carlistas capitaneados por Badia de Casteilserá incendió y demolió el castillo, temía que pudiera utilizarse como fortaleza por los enemigos liberales.
El lugar donde se encuentra el antiguo portal de entrada no es el mismo donde en 1212 se construyó un nuevo castillo. En este nuevo edificio aún se puede ver la inscripción que dice: Andreu Felip, maestro de obras, año 1212.
Castillo calificado con la distinción de Bien Cultural de Interés Nacional por la Generalidad de Cataluña y Bien de Interés Cultural por el Ministerio de Cultura.
(Pueblos fantasmas de Cataluña)
Se autoriza su construcción con la condición de que se edifique un castillo y una iglesia que sirvieran a la lucha contra los moros.
Algunos de sus muros tienen un grosor de dos metros, se fue ampliando y modificando a lo largo de los años.
Durante la Primera Guerra Carlista un batallón de carlistas capitaneados por Badia de Casteilserá incendió y demolió el castillo, temía que pudiera utilizarse como fortaleza por los enemigos liberales.
El lugar donde se encuentra el antiguo portal de entrada no es el mismo donde en 1212 se construyó un nuevo castillo. En este nuevo edificio aún se puede ver la inscripción que dice: Andreu Felip, maestro de obras, año 1212.
Castillo calificado con la distinción de Bien Cultural de Interés Nacional por la Generalidad de Cataluña y Bien de Interés Cultural por el Ministerio de Cultura.
(Pueblos fantasmas de Cataluña)