Reseña histórica
La fortaleza de Cea cumplió papel defensivo de la línea fronteriza del río del que toma nombre. La división del reino de Castilla y León motivó, durante los setenta años que transcurrieron hasta su definitiva reunificación, constantes fricciones. Su construcción debe ser, sin embargo, anterior a esta peripecia histórica. Se ha señalado que la fortaleza sirvió como presidio del rey navarro García a finales del siglo XI. En el Siglo XIV el castillo pertenecía a Juan Alfonso de Alburquerque. El monarca Pedro I - a quien sus detractores acusaban de ejercer un poder tiránico y cruel - ordenó el asalto y destrucción del castillo en la segunda mitad del siglo XIV.
Características arquitectónicas
Sólo han sobrevivido los restos de una majestuosa torre del homenaje, agrietada y en situación terminal, y algunos vestigios de una barbacana exterior. El derrumbe de los muros de la torre ha dejado al descubierto la intimidad de sus estancias interiores, que se distribuyen en diferentes pisos. El conjunto, que fue construido con mampostería, se coronaba con almena. Al pie de la torre del homenaje, y para reforzar las cárcavas terrosas excavadas por el río Cea, se construyó una barrera almenada de la que quedan en pie algunos vestigios.
Estado de conservación
Se conservan, únicamente, algunos lienzos del recinto interno y una parte de la muralla exterior, que soportan el paso de los años en estado de absoluto abandono.