La rehabilitación de la fortaleza de Villafuerte de Esgueva, tradicionalmente conocida como de Vellosillo, es suceso que merece ser saludado con optimismo. Al encaramarnos a su torre del Homenaje disfrutaremos de una singular panorámica del Valle de Esgueva, de adusta belleza. La implacable horizontalidad de las denominadas "seudoestepas" cerealistas de la meseta parece conceder, aquí, cierta licencia a la leve ondulación del terreno, a través de las laderas entre las que el discurrir del río se encaja.
Reseña histórica
Las primeras citas documentadas sobre la plaza fuerte de Vellosillo hunden sus raíces en el siglo XII. Hay que esperar, sin embargo, hasta el último tercio del siglo XV para asistir al inicio de las obras del edificio que hoy se nos muestra en aceptable estado de conservación, pese a la encarnizada rapiña que ha sufrido. Se cita a Garci Franco de Toledo como impulsor de las obras. Todos los tratadistas coinciden en destacar su condición de plebeyo con ínfulas de ennoblecimiento, que intentó aprovechar su fortuna para escalar posiciones en la jerarquía aristocrática. Notable polémica causó la decisión del nuevo señor de Vellosillo de sustituir el nombre de la plaza por el de Villafuerte. Al margen de trasnochadas querellas sobre su abolengo, debemos reconocer a Garci Franco el mérito de habernos legado un fantástico exponente de la mejor tradición arquitectónica militar castellana.
Características arquitectónicas
Sigue el modelo prototípico de los denominados castillos de meseta. Incrusta la torre del homenaje en una de las esquinas del recinto externo, mientras que en los ángulos restantes se instalan cubos cilindricos rematados con almenas sobre matacán, muy bien armado todo ello. Los restos arruinados de una muralla externa nos indican que gozó de protección perimetral mediante barbacana. Particularmente interesante resulta la visita al interior de la torre del homenaje, dividida en cinco pisos, dos de los cuales se rematan con bóveda de piedra de impecable factura.
Estado de conservación
La Asociación Española "Amigos de los Castillos" ha adquirido esta fantástica muestra de arquitectura militar, iniciando obras de reconstrucción y acondicionamiento interior para visitas e instalación de museo. Debemos felicitarnos por esta iniciativa, que vino a cortar de raíz el penoso fenómeno de expolio de sus materiales que la fortaleza venía padeciendo.
(Los castillos y fortalezas de Castilla y León - Carlos M. Martín Jiménez)
Reseña histórica
Las primeras citas documentadas sobre la plaza fuerte de Vellosillo hunden sus raíces en el siglo XII. Hay que esperar, sin embargo, hasta el último tercio del siglo XV para asistir al inicio de las obras del edificio que hoy se nos muestra en aceptable estado de conservación, pese a la encarnizada rapiña que ha sufrido. Se cita a Garci Franco de Toledo como impulsor de las obras. Todos los tratadistas coinciden en destacar su condición de plebeyo con ínfulas de ennoblecimiento, que intentó aprovechar su fortuna para escalar posiciones en la jerarquía aristocrática. Notable polémica causó la decisión del nuevo señor de Vellosillo de sustituir el nombre de la plaza por el de Villafuerte. Al margen de trasnochadas querellas sobre su abolengo, debemos reconocer a Garci Franco el mérito de habernos legado un fantástico exponente de la mejor tradición arquitectónica militar castellana.
Características arquitectónicas
Sigue el modelo prototípico de los denominados castillos de meseta. Incrusta la torre del homenaje en una de las esquinas del recinto externo, mientras que en los ángulos restantes se instalan cubos cilindricos rematados con almenas sobre matacán, muy bien armado todo ello. Los restos arruinados de una muralla externa nos indican que gozó de protección perimetral mediante barbacana. Particularmente interesante resulta la visita al interior de la torre del homenaje, dividida en cinco pisos, dos de los cuales se rematan con bóveda de piedra de impecable factura.
Estado de conservación
La Asociación Española "Amigos de los Castillos" ha adquirido esta fantástica muestra de arquitectura militar, iniciando obras de reconstrucción y acondicionamiento interior para visitas e instalación de museo. Debemos felicitarnos por esta iniciativa, que vino a cortar de raíz el penoso fenómeno de expolio de sus materiales que la fortaleza venía padeciendo.
(Los castillos y fortalezas de Castilla y León - Carlos M. Martín Jiménez)