La historia reservaba a la Torre de Albillos el destino más inesperado que hubiera podido imaginar quien, allá por el siglo XIV, ordenara su construcción. Acabó mudando su emplazamiento. En las segunda mitad del siglo XX una iniciativa orientada a la creación de un complejo hostelero fijó su atención en el atractivo turístico del edificio militar, que acabó viajando, desmembrado, desde la localidad original de Albillos hasta el margen de la carretera que une Burgos con Aranda de Duero, pocos kilómetros al sur de la capital castellana.
Reseña histórica
Los tratadistas sitúan el origen de la torre en el siglo XIV . Algunas reseñas documentales permiten constatar que bajo el reinado de los Reyes Católicos el edificio pertenecía al linaje Cartagena. En 1483 el obispo Luis de Acuña adquirió - de la familia Orense - el inmueble, y se lo donó a su hijo Diego Álvarez Osorio en los últimos años de la centuria.Características arquitectónicas
Tiene planta rectangular . Fue construida con sillería de irregular tallado. Ha conservado la corona almenada de su remate original, si bien con motivo de las obras de reconstrucción el antepecho del adarve se ha hecho volar ligeramente, apoyándolo sobre modillones que simulan arquería ciega inexistente en la obra primitiva. Para aprovechar el espacio de su recinto interior se incrementó la altura de la torre, elevando sus muros varios metros sobre el diseño original. Se han respetado los balcones amatacanados instalados en medio de las fachadas. La obra actual muestra alguna ventana ajimezada, con parteluz de basa, fuste y capitel sobre el que descansan dos arcos de medio punto.Estado de conservación
Tras la completa reedificación muestra un estado de conservación impecable.(Los Castillos y Fortalezas de Castilla y León - Carlos M. Martín Jiménez)